Metabolismo de la distribución del colesterol: el transporte inverso
21 de junio de 2019
Por Elsevier Connect
Un conocimiento profundo del metabolismo de las lipoproteínas y aterogénesis es imprescindible para entender cómo se desarrolla un proceso tan clave en nuestro organismo como la distribución del colesterol y los triacilgliceroles entre el intestino, el hígado y los tejidos periféricos. Para echaros una mano en esta ardua tarea, os compartimos un esquema basado en la obra clave, Bioquímica médica se abre en una nueva pestaña/ventana, con todo lo que necesitas saber sobre el transporte inverso del colesterol (desde la periferia de vuelta al hígado). Esta obra, totalmente actualizada en su 5ª edición, no solo describe los aspectos esenciales de la ciencia básica, sino que hace especial énfasis en el impacto que tienen los procesos y alteraciones bioquímicas en la práctica clínica.
Antes de meternos de lleno en el esquema, presentamos a uno de sus actores principales, las lipoproteínas, que son partículas del plasma compuestas por proteínas y diversas clases de lípidos. Su estructura permite el transporte de los lípidos hidrofóbicos en el medio acuoso del plasma. Como mencionábamos al principio, ellas son las encargadas de conducir el colesterol y los triacilgliceroles entre el intestino, el hígado y los tejidos periféricos. Cumplen una doble función: distribución de los triacilgliceroles y suministro de colesterol a las células. Mientras los triacilgliceroles son transportados hacia la periferia para su almacenamiento a largo plazo en el tejido adiposo; el colesterol, por el contrario, se mueve en ambas direcciones (su transporte desde los tejidos periféricos de vuelta al hígado se conoce como «transporte inverso»). El colesterol presente en las lipoproteínas constituye una reserva extracelular a disposición de las células a través del receptor LDL. El colesterol que ha sido transportado al hígado puede excretarse por la bilis.
El transporte de los triacilgliceroles está relacionado con el metabolismo de los combustibles corporales, mientras que el colesterol transportado forma una reserva extracelular disponible para las células. Las alteraciones del metabolismo de las lipoproteínas son el factor fundamental en el desarrollo de la aterosclerosis, un proceso que apuntala la enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ECVA), en la que se incluyen la cardiopatía coronaria, el ictus y la vasculopatía periférica.
Obtén toda la información sobre la obra de referencia de los estudiantes de Medicina, Bioquímica médica se abre en una nueva pestaña/ventana, clicando aquí se abre en una nueva pestaña/ventana