Sistema nervioso: oído externo, oído medio y oído interno
29 de mayo de 2023
Por Elsevier Connect
Te presentamos una nueva entrega de la serie tributo al hombre que cambió la anatomía para siempre: Frank H. Netter, el mejor ilustrador médico de la historia. En esta ocasión, tomando como referente la obra: Netter. Anatomía básica por sistemas se abre en una nueva pestaña/ventana, repasamos el sistema nervioso y su conexiones con el oído.
Sistema Nervioso
El sistema nervioso tiene dos divisiones estructurales: el sistema nervioso central (SNC) y el sistema nervioso periférico (SNP). El SNC está formado por el encéfalo y la médula espinal. El SNP está constituido por todo el tejido nervioso situado fuera del SNC: los nervios que funcionan como enlaces de comunicación entre el cuerpo y el SNC, y los ganglios que contienen los cuerpos celulares neuronales. El sistema nervioso somático inerva las estructuras relacionadas con el movimiento y el soporte del cuerpo, es decir, la piel, el músculo esquelético, los tendones, los huesos y los ligamentos. En cambio, el sistema nervioso autónomo (SNA) inerva las estructuras viscerales relacionadas con el mantenimiento de la homeostasis mediante procesos como la digestión y la circulación.
El oído es uno de los órganos receptores de los sentidos especiales. Forma parte del sistema sensitivo somátio y autónomo (SNA).
El oído se compone de tres regiones denominadas oído externo, medio e interno. El oído externo tiene dos partes, la oreja y el conducto auditivo externo. La oreja es una estructura de forma ovalada constituida por un núcleo de cartílago elástico cubierto por piel. Rodea al conducto auditivo externo, que es un conducto curvo formado por cartílago (parte lateral) y hueso (parte medial). En el extremo medial del conducto se encuentra la membrana timpánica, semitransparente y de forma ovalada, que separa el oído externo de la cavidad timpánica del oído medio. La cavidad timpánica contiene los huesecillos del oído, y uno de ellos, el martillo, tiene un manubrio (mango) que se une a la cara interna de la membrana timpánica. Esta fijación ejerce una ligera tensión sobre la membrana que produce una concavidad en su cara externa. La parte central de la membrana timpánica donde se fija el manubrio se denomina ombligo de la membrana timpánica.
Las ondas sonoras recogidas por el oído externo se transmiten a los huesecillos del oído medio mediante las oscilaciones de la membrana timpánica. Los componentes del oído externo reciben inervación sensitiva de múltiples nervios, entre ellos el NC V, el NC VII y el NC X.
El oído medio es una cavidad de forma irregular dentro del hueso temporal (cavidad timpánica) que está revestida por una mucosa. Dentro de la cavidad se encuentran los huesecillos del oído, el martillo, el yunque y el estribo, así como varios músculos y nervios. Las vibraciones de la cadena de huesecillos transmiten las ondas sonoras al oído interno a través de la base del estribo, que se aplica a la ventana vestibular (oval) de la pared medial de la cavidad timpánica.
La mucosa del oído medio recibe inervación sensitiva del ramo timpánico del nervio glosofaríngeo, que forma un plexo en la superficie del promontorio. El nervio facial tiene un trayecto posterior a la cavidad timpánica en el conducto facial. Da origen a dos ramos: la cuerda del tímpano, que pasa a través del oído medio entre el martillo y el yunque; y el nervio estapedio, que inerva el músculo estapedio. La cuerda del tímpano transporta neuronas parasimpáticas que inervan las glándulas salivares submandibular y sublingual, y neuronas aferentes especiales para el gusto de los dos tercios anteriores de la lengua.
El oído interno está formado por múltiples cavidades dentro de la porción petrosa del hueso temporal que contienen los órganos sensitivos especiales para la audición y el equilibrio. Estas cavidades, conocidas colectivamente como laberinto óseo, están formadas por la cóclea, el vestíbulo y los tres conductos semicirculares óseos. El conducto coclear contiene el órgano sensitivo especial para la audición (órgano de Corti). Los órganos que transmiten información sobre el equilibrio (máculas y crestas ampulares) se encuentran en el sáculo, el utrículo y las ampollas (porciones dilatadas) de los conductos semicirculares membranosos. Los receptores sensitivos de estos órganos contienen células ciliadas (pilosas) que son estimuladas por el movimiento de los líquidos. Las ondas sonoras procedentes de la base del estribo se transmiten a través de la perilinfa y atraviesan las paredes del laberinto membranoso hasta las cavidades llenas de endolinfa. La estimulación de las células ciliadas (pilosas) genera potenciales de acción en las divisiones coclear y vestibular del NC VIII.
Netter. Anatomía básica por sistemas
Nueva obra de la familia "Netter " que presenta la anatomía basada en una organización por sistemas. El texto, sencillo y conciso con una fuerte correlación clínica está magníficamente ilustrado tanto por las propias imágenes Netter o estilo Netter como por las de radiodiagnóstico.
Se encuentra organizado en nueve secciones; la primera a modo de introducción y el resto dedicadas al estudio en profundidad de cada uno de los sistemas corporales y de sus estructuras más importantes. Al final de cada una de las secciones se incluyen 10 preguntas de autoevaluación de dos tipos: unas para recordar conocimientos y otras para su aplicación en la práctica clínica.
Incluye también numerosas tablas que sintetizan la información y acceso a e-book+, convirtiéndose en un importante elemento didáctico para la memorización y aprendizaje.