El sistema linfático y morfología de los ganglios
16 de diciembre de 2019
Por Elsevier Connect
Estudiar, formarse o tomar apuntes de Inmunología celular y molecular se abre en una nueva pestaña/ventana, 9ª ed., Abbas, A., es hacerlo con el libro de texto de la especialidad más recomendado de todo el mundo. La claridad de sus explicaciones y de su material gráfico son dos de los grandes puntos fuertes de este título; como ejemplo, esta visión del sistema linfático con la morfología de los ganglios, ¡acompañada de sus correspondientes apuntes!
Sistema linfático
El sistema linfático consiste en vasos especializados, llamados linfáticos, que drenan el líquido de los tejidos, y ganglios linfáticos interpuestos a lo largo de los vasos (ver infografía). Los linfáticos son esenciales para la homeostasis hídrica y las respuestas inmunitarias. El líquido intersticial se forma de manera constante en todos los tejidos vascularizados por el movimiento de un filtrado de plasma que sale de los capilares, y la velocidad de formación local puede aumentar espectacularmente cuando el tejido se lesiona o infecta. La piel, el epitelio y los órganos parenquimatosos contienen numerosos capilares linfáticos que absorben este líquido de los espacios que hay entre las células tisulares.
Los capilares linfáticos son conductos vasculares con un extremo ciego recubiertos de células endoteliales solapadas sin las uniones intercelulares herméticas ni membrana basal continua que son típicas de los vasos sanguíneos. Los vasos linfáticos están unidos a la matriz extracelular por fibras de elastina, que sirven para mantenerlos abiertos cuando hay una excesiva acumulación de líquido y tumefacción tisular. Estos vasos permiten la captación libre de líquido intersticial, y la disposición solapada de las células endoteliales y las válvulas en una dirección dentro de sus luces impide el reflujo de líquido. El líquido absorbido, llamado linfa, se bombea hacia vasos linfáticos cada vez mayores y convergentes por la contracción de células musculares lisas perilinfáticas y por la presión ejercida por el movimiento de los tejidos osteomusculares. Estos vasos se funden en linfáticos aferentes que drenan en los ganglios linfáticos, y la linfa sale de los ganglios a través de los linfáticos eferentes.
Como los ganglios linfáticos están conectados en serie por los linfáticos, un linfático eferente que sale de un ganglio puede servir de vaso aferente para otro. El vaso linfático eferente al final de una cadena de ganglios linfáticos se une a otros vasos linfáticos, lo que finalmente culmina en un gran vaso linfático llamado conducto torácico. La linfa procedente del conducto torácico se vacía en la vena cava superior, lo que devuelve el líquido al torrente sanguíneo. Los linfáticos procedentes de la región superior derecha del tronco, el brazo derecho y el lado derecho de la cabeza drenan en el conducto linfático derecho, que también drena en la vena cava superior. A la circulación vuelven cada día alrededor de 2 litros de linfa normalmente, y la interrupción del sistema linfático por tumores o algunas infecciones parasitarias puede provocar una tumefacción tisular grave Los vasos linfáticos recogen antígenos microbianos de las puertas de entrada y los transportan a los ganglios linfáticos, donde pueden estimular respuestas inmunitarias adaptativas. Los microbios entran en el cuerpo más a menudo a través de la piel y los aparatos digestivo y respiratorio. Todos estos tejidos están recubiertos de barreras epiteliales que contienen DC y todos drenan en los vasos linfáticos. Las DC capturan antígenos microbianos y entran en los vasos linfáticos a través de espacios en la membrana basal. La migración de las DC al ganglio linfático está guiada por quimiocinas producidas en el ganglio . Otros microbios, así como antígenos solubles, pueden entrar en los linfáticos independientemente de las DC. Además, los mediadores infl amatorios solubles, como las quimiocinas y otras citocinas, que son producidos en los lugares de infección entran en los linfáticos y activan el endotelio linfático para favorecer más la migración de las DC al vaso. De este modo, los ganglios linfáticos localizados a lo largo de los vasos linfáticos actúan como fi ltros que muestrean la linfa en busca de antígenos solubles y asociados a las DC. Los antígenos capturados pueden ser vistos por las células del sistema inmunitario adaptativo.